Por Ibueno. Viernes 19 de agosto de 2011
#CrónicasDeUnEmbarazo
Es increíble como el embarazo te hace pensar en el futuro. Esto ha sido un cambio de rutina muy peculiar en mi vida porque cualquier persona que me conoce bien sabe que no me preocupo mucho por “el mañana” jajaja! Y bueno, SOBRA decirles que hoy en día, “el mañana” (puntualmente por la segunda mitad de Octubre) tiene un significado muy importante, tanto que jamás lo llegué a imaginar.La verdad es que no soy muy organizada en este aspecto y me dejo llevar por los días como un río en su cauce pero recientemente he tenido que tomar decisiones que han puesto en perspectiva mi vida y me han hecho madurar un poco.
Quien iba a pensar que escoger el color de las cortinas para el cuarto del bebé te lleven a considerar si es que vas a querer tener más hijos.
Mi abuela decía algo que se me quedó muy grabado: “cuando tienes un hijo nunca vuelves a dormir igual, tenga 40 días, 4 ó 40 años”. Por fin empiezo a entender a qué se refería…
Sentimos una responsabilidad absoluta por la personita que está a punto de llegar y nuestro “instinto materno” nos pide ir paso por paso, planeando hasta el más mínimo detalle de su futuro para protegerla.
También a lo largo del embarazo obviamente echamos a volar la imaginación y bueno… lo primero con lo que soñamos es como va a ser físicamente nuestro bebé. Visualizamos el principio de su historia desde su primer aliento… los momentos felices que nos hará pasar, los juegos, la primera palabra, la primera sonrisa y… si ustedes son tan curiosas como yo, seguramente ya los imaginaron hasta de ¡adolescentes!
Esta etapa en la vida de una mujer está repleta de sueños y deseos. Nos llenamos de ilusión y sentimos la necesidad de preparar nuestro entorno para que todo salga perfecto! Sin embargo, la verdad es que no tenemos control sobre muchas de las cosas que estamos viviendo aunque nos guste pensar lo contrario.
El embarazo y el parto siempre son “sorpresa” porque todas las mujeres somos diferentes, así que cada experiencia es única.
Lo mejor que podemos hacer por los bebés que vienen en camino es rendirnos ante lo desconocido y estar tranquilas con esa decisión. Así podremos disfrutar de nuestra experiencia al 100% y obtener lo mejor de ella. El futuro está lleno de posibilidades.
Algo que me llena de paz y me hace sentir más preparada para la espera de la nena es recolectar información, recientemente generé mucha curiosidad por tomar cursos y créanme que todo ese conocimiento tranquiliza bastante.
Inclusive el sábado pasado tomé una clase de “cuidados para bebés” a la cual me acompañó mi mamá ¡No saben que emotiva experiencia! Claro que mi mamá no paró de decirme cómo ha cambiado todo desde que ella me tuvo y eso que ¡no fue hace mucho! jejeje…
A pesar de que mi experiencia con bebés se limita al contacto que he tenido con mi sobrina Michelle, quiero decirles con mucho orgullo que tengo una idea general bastante acertada de cómo cuidar a uno, pero aun así la clase resultó siendo de gran ayuda y me dio más seguridad.
Digo. Tengo que aceptar que las primeras veces que cuidé a la pobre Michelle si le tocó que la cargara como “balón de futbol americano” a diferencia de Jaime que, tiene un “imán” con los bebés. Jajaja!
Hay un pensamiento espiritual muy bello que dice que cada bebé que está por nacer escoge a su madre porque ella es la única que puede darle todo lo que él particularmente necesita. ¿Qué reconfortante pensamiento no?
Al final, lo importante no es que tengamos el cuarto del bebé listo para esperarlo, sino la confianza absoluta en nosotras mismas de que nos entregaremos con amor y responsabilidad a esa nueva faceta como madres, en la que efectivamente… tenemos en nuestras manos el bienestar de una vida.
“Mother is the word for God on the hearts and lips of all little children”
-William Makepeace Thackeray
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